El programa trabaja con cooperativas locales para fortalecer su administración empresarial y establecer novedosos sistemas silvopastoriles, que aumentan la producción y la rentabilidad al mismo tiempo que protegen y restauran áreas de bosque.
La ganadería en Nicaragua representa un importante sector económico del país. En 2017, más de la cuarta parte de las exportaciones provinieron del ganado, incluyendo el sector de productos lácteos y carne. Sin embargo, este sector es extremadamente vulnerable a los cambios en los patrones climáticos y la producción actual está por debajo de los niveles potenciales. A través de la adopción de sistemas silvopastoriles, las cooperativas y fincas modelos escalarán estas prácticas para mejorar la cantidad y calidad de la producción lechera, conservar los recursos naturales y fortalecer su resiliencia ante el cambio climático.